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Las orejas de los perros son una parte importante de su cuerpo, ya que les permiten escuchar y comunicarse con el mundo que les rodea. Sin embargo, también son una zona propensa a la acumulación de suciedad, bacterias y hongos, lo que puede provocar infecciones y otros problemas de salud.
Por eso, es importante que los dueños de perros aprendan a limpiar las orejas de sus mascotas de forma adecuada y regular. En este artículo, te explicamos cómo hacerlo en 4 pasos.
1. Prepara el material necesario
Antes de empezar a limpiar las orejas de tu perro, es importante que tengas a mano todo lo que necesitas para hacerlo de forma segura y efectiva. Los materiales que necesitarás son:
- Un limpiador de oídos específico para perros;
- Algodón o gasas estériles;
- Toallas de papel o paños húmedos.
Es importante que utilices un limpiador de oídos específico para perros, ya que los productos diseñados para humanos pueden ser demasiado fuertes o irritantes para la piel sensible de los perros. Además, asegúrate de que el algodón o las gasas estén esterilizados para evitar la introducción de bacterias en el canal auditivo de tu perro.
2. Examina las orejas de tu perro
Antes de empezar a limpiar las orejas de tu perro es importante que examines cuidadosamente su estado para detectar cualquier signo de infección o inflamación. Algunos de los síntomas que indican que tu perro puede tener un problema en los oídos son:
- Olor fuerte y desagradable en las orejas;
- Enrojecimiento o inflamación en la zona;
- Presencia de secreciones o exudados;
- Rascado excesivo de las orejas o sacudidas de cabeza frecuentes.
Si detectas alguno de estos síntomas, es importante que lleves a tu perro al veterinario para que le haga una revisión y determine el tratamiento adecuado. En algunos casos, puede ser necesario administrar medicamentos o realizar una limpieza más profunda de las orejas.
3. Limpia las orejas de tu perro
Una vez que hayas examinado las orejas de tu perro y comprobado que están en buen estado, puedes empezar a limpiarlas siguiendo estos pasos:
- Agita el frasco del limpiador de oídos para perros y aplica unas gotas en el canal auditivo de tu perro. Masajea suavemente la base de la oreja para que el líquido penetre bien en el interior;
- Deja que tu perro sacuda la cabeza para expulsar el exceso de líquido y la suciedad acumulada en el interior de la oreja;
- Con una gasa o un trozo de algodón estéril, limpia cuidadosamente la parte externa de la oreja y el pabellón auricular para retirar cualquier resto de suciedad o líquido;
- Repite el proceso en la otra oreja de tu perro.
Es importante que no introduzcas el algodón o la gasa en el canal auditivo de tu perro, ya que podrías dañar su tímpano o provocar una infección. Limítate a limpiar la parte externa de la oreja y el pabellón auricular.
4. Mantén las orejas de tu perro limpias y saludables
Para evitar problemas de salud en las orejas de tu perro, es importante que las mantengas limpias y saludables de forma regular. Algunas medidas que puedes tomar para conseguirlo son:
- Limpia las orejas de tu perro al menos una vez a la semana, o con la frecuencia que te recomiende tu veterinario;
- Seca bien las orejas de tu perro después del baño o de un chapuzón en el agua;
- Evita que tu perro se meta en el agua sucia o en charcos, ya que esto puede aumentar el riesgo de infecciones en los oídos;
- Vigila la alimentación de tu perro y asegúrate de que recibe una dieta equilibrada y adecuada a sus necesidades nutricionales.
Si sigues estas recomendaciones y limpias las orejas de tu perro de forma regular y adecuada, podrás prevenir la aparición de infecciones y otros problemas de salud en esta zona tan importante de su cuerpo.