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Un proyecto educativo innovador
La colección de figuritas «Amici Cucciolotti» ha trascendido su propósito inicial de ser un simple pasatiempo para convertirse en un poderoso vehículo de enseñanza. Cada año, millones de niños participan en esta iniciativa, que no solo les brinda la oportunidad de coleccionar, sino que también les enseña la importancia de la solidaridad y el respeto por los animales y el medio ambiente. En 2025, el lema «Colleziona un futuro migliore» invita a los más jóvenes a reflexionar sobre cómo sus acciones diarias pueden contribuir a un mundo más justo y sostenible.
Impacto en la protección animal
Este año, el proyecto ha dado un paso significativo al donar 12 nuevos vehículos operativos a la Ente Nazionale Protezione Animali (ENPA). Estos vehículos están destinados a mejorar la eficacia de los rescates de animales abandonados, maltratados o heridos. Gracias a estos nuevos recursos, los voluntarios de ENPA podrán responder más rápidamente a las emergencias, asegurando una ayuda oportuna a miles de animales en peligro. Desde 2015, los voluntarios han recorrido más de 4 millones de kilómetros para salvar animales en dificultades, demostrando el impacto positivo de esta colaboración.
Educación a través del juego
El proyecto no solo se centra en la recaudación de fondos para el rescate de animales, sino que también busca educar a las nuevas generaciones. A través de las figuritas, los niños aprenden valores fundamentales como la empatía y la responsabilidad. Cada figurita representa una oportunidad para discutir temas importantes, como el bullying y la protección del medio ambiente. Además, la colaboración con organizaciones como Save the Children y AVSI permite llevar el mensaje de respeto por los animales y el entorno a contextos difíciles, como las periferias italianas y los pueblos en Kenya y Uganda.
Un futuro más consciente
La colección «Amici Cucciolotti» es un claro ejemplo de cómo el juego puede transformarse en un potente instrumento educativo. Los niños, al coleccionar figuritas, no solo se divierten, sino que también se convierten en adultos conscientes y responsables. El editor Dario Pizzardi enfatiza que cada figurita es un paso hacia un futuro mejor, donde el respeto por los animales y el medio ambiente ocupa un lugar central en nuestra sociedad. Con el apoyo de todos, podemos seguir construyendo un mundo más cucciológico, donde cada gesto cuenta y cada niño puede hacer la diferencia.
