La Asl Toscana sud est impulsa la terapia asistida con animales en los hospitales

La terapia asistida con animales como herramienta de bienestar En los últimos años, la terapia asistida con animales ha ganado cada vez más atención en el ámbito de la salud mental y física. La presencia de mascotas ha demostrado ser capaz de reducir la ansiedad, proporcionar consuelo y mejorar el estado de ánimo de los pacientes. Este enfoque innovador se inserta en un contexto sanitario donde la humanización de los cuidados se ha convertido en una prioridad. La Asl Toscana sud este ha decidido adoptar un reglamento que permite las visitas de animales dentro de las estructuras hospitalarias y de las residencias sanitarias asistenciales (Rsa). Reglamento para las visitas de animales El nuevo reglamento establece que las visitas de mascotas están permitidas previa solicitud por parte del paciente. Sin embargo, hay excepciones para áreas sensibles como la sala de emergencias y los quirófanos. Para garantizar la seguridad de todos, es fundamental que los familiares o cuidadores informen al personal sanitario al menos 24 horas antes de la llegada del animal. Además, será necesario acordar el recorrido a seguir dentro de la estructura para llegar a la sala dedicada a las visitas. Formación del personal sanitario Para apoyar esta iniciativa, más de 60 operadores sanitarios ya han comenzado un programa de formación específico. Esto no solo garantizará una adecuada acogida para los animales, sino que también contribuirá a crear un ambiente más empático y humano para los pacientes. La presencia de animales en las Rsa representa una oportunidad para mejorar la calidad de vida de las personas más vulnerables, brindando alegría y consuelo en un momento difícil. Un modelo para otras regiones La Asl Toscana sud este se distingue como una de las primeras realidades en Italia en implementar un camino tan estructurado para las visitas de mascotas. Esta iniciativa no solo refleja un cambio en la percepción de la salud, sino que también subraya la importancia del bienestar psicológico y social en el proceso de atención. Como afirmó el consejero toscano de derecho a la salud, Simone Bezzini, se trata de una iniciativa “pionera” que podría servir de modelo para otras regiones.